A veces me paro, sin pensar
y veo nubes acariciar montañas,
pájaros azules y negros volar,
veo ramas tocadas por el viento
y caminos que me llevan no sé bien a donde.
A veces me paro, sin pensar
y dejo que el sol me caliente
que la brisa cierre mis ojos
y escucho las piedras que voy pisando.
A veces me paro, sin pensar
y mis manos sienten las hojas
y puedo oler cada brizna de hierba.
A veces me paro, me paro a pensar
y la noche me esconde sus lunas.